martes, 24 de enero de 2012

Sólo Tú puedes atarlo...

Hoy he comprendido la distancia...
pero esta vez no he visto una herida.
Esta vez es el olvido de los que ya no recuerdan, 
de los que han dejado de oír su latido.
y ahora entiendo porqué están mudos y sordos...
Todo os será perdonado, 
pero es necesario que despertéis del sueño vacío.
Lo dijiste siempre: 
Yo soy el que ata al hombre fuerte... (Mc 3,27)
Toda la Teología...
Pero vosotros veis culpa en la inocencia,
maldad en el bien,
veis sucio lo que está limpio.
Tú sólo puedes atar el mal, desbaratarlo, 
y robarle todo lo que mantiene en la muerte, 
y devolverlo todo a la vida. 



Es nuestra mirada, 
es el ojo del corazón 
el que puede reconocerte
sólo Bondad, 
sólo Inocencia, 
sólo Verdad, 
sólo Amor...
Tú lo eres, 
en mi empañado espejo. 
Y aunque esté lleno 
de heridas, de grietas,
no hay distancia.
Tan sólo este abandono 
y esta libertad, 
y este saberme...
algo de Ti, 
eternamente...
(Eucaristía,  23 de Enero de 2012)

domingo, 22 de enero de 2012

Peces...

No he quitado todavía el lodo, y mis aguas son turbias...
Pescador, ¡sácame del agua!
Quiero ver tus labios que dicen mi nombre,
que me hablan, 
desde tu profundidad tan cristalina...
No puedo nadar como quisiera,
¡sácame del agua!
aunque sólo me des unas gotas
para mis ojos sucios,
aunque sólo merezca migajas,
¡sácame del agua!
... y lánzame a tu Fuente,
sólo tu vida,
nada más que tu vida, yo quiero...
Mira bien, te lo suplico,
mi piel ya no brilla plateada,




quizás te olvides de mí,
quizás me dejes entre tantos, 
mira que a veces me escondo, 
porque todavía tengo miedo de tus redes...
Busca si es preciso entre las piedras,
que no me escape,
sólo sé que aquí me muero
aunque no lo diga o me resista,
te necesito, lo sé, 
porque yo... he conocido tu fuente.
Y si luego ya no puedes echarme,
por lo menos sentiré de nuevo tus manos
y si es mi destino el fuego,
hoy puedo decírtelo,
no temas,
moriré de la herida de amor 
que no se cura...

22 de Enero de 2012
Eduardo
 

sábado, 21 de enero de 2012

Sol... a medianoche


"Ya ves, lo intenté todo,
Anduve todos los caminos,

Pero nunca pude encontrar a un amigo a quien pudiese amar más;
Bebí en todas las fuentes, saboreé todas las uvas,
Pero nunca probé un vino más dulce que tu.
Leí cientos de códices eruditos,
En cada letra sólo te veía 
a ti.
Borré la caligrafía con mis lágrimas
Y la página resplandeciente se convirtió en tu espejo.
Escuché tu voz en cada soplo de brisa rumorosa,
La nieve, la hierba, sólo eran hermosísimos velos que cubrían tu rostro.
Me sumergí en un océano sin orilla,
Las perlas luminosas sólo a ti te reflejaban.
Luego vino la tempestad.
El jardín de mi corazón tiritaba helado,
Esparcidas sus hojas.
Se hizo desierto
Y nube yerma,
Y silencio.
Y de repente, el sol a medianoche: Tu."

(Annemarie Schimmel, Poemario Ruiseñores bajo la nieve)

miércoles, 18 de enero de 2012

Espigas...



¿Cómo lo hiciste? habíamos secado el pozo pero Tú lo llenaste de agua, y donde nosotros arrasamos la tierra Tú hiciste crecer un jardín exuberante de vida... y pensamos todavía que es posible matar el Amor...
Porque llenamos de prohibiciones lo que Tú nos habías dado sin límites... (Mc 2,23-24)
Emparejaste los días, al domingo le diste el miércoles, y al viernes el martes, y al lunes el jueves. Pero el Sabbath, en tu descanso, se había quedado solo. Y le diste a la humanidad como Esposa. Y espigas para el banquete de bodas...
¿No te das cuenta? Dios te lo ha entregado porque estabas solo, sólo para ti. Sabbath, tiempo y descanso sagrados, intimidad para saborear espigas. 
Has dado a lo sagrado el sabor del pan.



Arrancadme las espigas,
Crecen y hacen santa mi hambre,
Sus sabores se han perdido en el hontanar del desierto,
Te busco a ti, mi comida.
Dejad que viva el beso que no acaba,
Y en el fuego me abrase,
Siete veces, siete…
…mientras me haces Pan que baja del cielo,
…Y te busco,
Soy aquel al que el dolor de tu abrazo 
ha dejado arrancado,
Y ya mueles y amasas,
y soy beso y comida,
porque tú no arrancas de manos
sino de abrazos.
Dejadme vivir el eterno instante,
en olvidado silencio, dulce olor de la tierra mojada,
Beso y pan infinitos,
Tú, mi comida.

miércoles, 11 de enero de 2012

No sé si eres Tú...

No sé si eres Tú...
pero sé que sólo Tú te puedes darme.
Me envuelves como luz y mi deseo arde,
y te siento en él, que te acercas,
y tiemblo...
de una especie de gemido que enloquece...
Porque no sé decirlo.
Pero todos los roces de mi cuerpo se concentran,
y mi conciencia se hace una,
en la misma vibración, 
si es Tu Presencia,
y tiembla... 
unida al deseo de tenerte que me arrastra.
Todo yo, fusión de una Ternura indescriptible,
acelerado respirarte,
mientras todo lo mío llenas,
hasta que la Compasión
por todos los poros 
me transpira...
Pasas y te veo,
busco y ya te has ido...
¿Cómo será permanecerte?
Se acompasa el aliento 
que antes quemaba,
y más allá de todo 
me siento.
Un quedo latido,
y silencio que cubre las grietas 
que una vez más has abierto.
Y duele, Tú lo sabes,
con un dolor apaciguado,
tanto amor...
así derramado.
Eucaristía, 9 Enero 2012

sábado, 7 de enero de 2012

Agua

Agua, Espíritu, Amor... inevitable camino (Mc 1,7-11)
Algo sucede y sólo el murmullo del agua y un hombre que se siente pequeño, son testigos. Los que quieren ver no ven. Sólo el sentirse pequeño disipa la vista. No es pequeño Juan, es grande; pero el que ha venido es mayor que él, es Enorme. 


No importa si yo no tengo nada, no importa si nada puedo, no importa si soy pobre y pequeño, sólo importa que Él lo tenga todo, lo sea todo, lo pueda todo...
¡Cuánto no debería rasgarse en nuestra vida para dejar al Espíritu crear de nuevo! 
ahí, por las fisuras, puede entrar Aquel al que nada retiene. 
Soy como el cielo que se rasga, envuelvo el misterio de tus dones, 
Tú te sumerges en el agua del Amor y todo lo haces nuevo. 
Yo, sin pretenderlo, me siento arrastrado por tu corriente y, sin embargo, me quedo. 
Pero ya no soy yo, el agua me ha engendrado de nuevo. 
Y el Cielo hace nueva la Tierra.
Una incontenible pasión, un arrebato, temblor que me sacude, éxtasis de Tu Presencia
y, como un mendigo, te sigo necesitando.
Pero ahora todo me confirma y me conforta... 
y sé que Tú has venido.
Eduardo

lunes, 2 de enero de 2012

he soñado...


Llenar de gestos, de abrazos, de vida... cada esquina del corazón de quienes hacen la historia en humildad y silencio...









http://www.youtube.com/watch_popup?v=hN8CKwdosjE