sábado, 21 de enero de 2012

Sol... a medianoche


"Ya ves, lo intenté todo,
Anduve todos los caminos,

Pero nunca pude encontrar a un amigo a quien pudiese amar más;
Bebí en todas las fuentes, saboreé todas las uvas,
Pero nunca probé un vino más dulce que tu.
Leí cientos de códices eruditos,
En cada letra sólo te veía 
a ti.
Borré la caligrafía con mis lágrimas
Y la página resplandeciente se convirtió en tu espejo.
Escuché tu voz en cada soplo de brisa rumorosa,
La nieve, la hierba, sólo eran hermosísimos velos que cubrían tu rostro.
Me sumergí en un océano sin orilla,
Las perlas luminosas sólo a ti te reflejaban.
Luego vino la tempestad.
El jardín de mi corazón tiritaba helado,
Esparcidas sus hojas.
Se hizo desierto
Y nube yerma,
Y silencio.
Y de repente, el sol a medianoche: Tu."

(Annemarie Schimmel, Poemario Ruiseñores bajo la nieve)

1 comentario:

  1. "despertar enardecido al reconocer a cada criatura a través de Dios, y no a Dios a través de las criaturas"
    (Juan de la Cruz)

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